martes, 28 de febrero de 2012

paréntesis


Ella escribe después de mirar a su alrededor, para contar lo que ha visto, aunque lo que vea ni le guste  ni le corresponda.  Trata de interpretar la vida.

Pero   vivir, lo que se llama de verdad vivir, es meterse en la vida hasta los dientes, no relatarla.

Se ha dejado hipnotizar  por las palabras, se ha deslumbrado con ellas, sin darse cuenta de su peligro, que es tan grande como absorbente.

La música no es una partitura, y la vida no esta ahí para que la traduzcan. 

Ahora se toma una tregua.  Se viste de audacia, aletea, y mira hacia el horizonte buscando un destino.

Con los cascotes de una vida, quizá pueda construirse una nueva.

Así  sea


jueves, 16 de febrero de 2012

ad libitum

Ya va siendo hora de que poses los pies en la tierra, le dijo.

Deja de zarandearte en la nostalgia.  Estas agotando los tiempos que tenías destinados.  Sobrevuelas las emociones, sin abrazarte a ninguna, Has de aliviar el dolor con el placer, o se multiplicara, hasta el desespero, le dijo.

Voy a aturdirte con el  ruido de la vida. Hare florecer tus labios, que hoy están llenos  de verdín como tapias abandonadas. A tomarte  sorbo a sorbo, frente a las puertas abiertas del deseo. Quiero endulzar  tu piel, con el frágil gesto de la ternura. Sellar tus gemidos con besos.  Renacerás  estremecida, y  te perderás  en mis ansias por ti, le dijo.

 El le dio su palabra de honor.

Ella no pudo darle ni una palabra de amor

jueves, 9 de febrero de 2012

la vida pasa

Ella nunca quiso cambiar el destino de las cosas. No usaba crisálidas para proteger la esencia de los riesgos.

Dejaba que la vida, con su esplendor y su crueldad, coloreara sus días, sin ponerle límites de antemano.

No sabemos como ha sido nuestro  último amor, hasta que no concluye. Hasta después de vivirla, no sabemos como fue nuestra vida.

Igual que cuando cierras un libro ya leído, y tus manos reposan serenas sobre su cubierta, sin saber que hacer, ocupadas en la nada.

Ese instante de imperturbable éxtasis, donde nos preguntamos si merece la pena  luchar, o nos conformamos con las pasiones  domesticas. 

Nos conformamos, pero mal.


Imagen "robada" a Opin, de su excelente blog  De Letras y Colores. Gracias socio.

domingo, 5 de febrero de 2012

ahora

Sus sentidos están adormilados, como a la espera de una música de arrebato, que los ponga en pie.

Las ideas se arremolinan, y juegan a un escondite caótico e insensato.   Su mirada se pierde entre las formas y colores, sin registrar imágenes, sin retener  matices.  Las voces le llegan como murmullos, y ella se hace un collar de palabras, que adorna su piel.  Su alma se columpia entre los limbos y la certeza,  sin poner un pie en la realidad, Las letras se le escapan, como huyendo de unas frases  desacertadas, y se pierden en el cosmos de otras literaturas.

Ahora solo se deja mecer, por esa mano inmensa, agitada , imprescindible e imprevisible, que es la vida.