miércoles, 26 de octubre de 2011

revuelo vital

Cualquier renovación es arriesgada, pero también necesaria, conveniente, imprescindible.

Hay que quemar sin miedo, los días. Remodelar, transformar las costumbres gastadas, por aventuras repletas de sentido, o rebosantes del más delicioso absurdo.

La eternidad, lo inmutable, no existe ni en la mejor de las circunstancias. El hombre esta hecho para vivir, para desvivirse, no para ver pasar la vida.

Detenerse frente al misterio de lo impreciso, es una cobardía, una estéril cobardía, que le impide avanzar, con una ración de esperanza, por el camino de lo infinito.

No sabemos lo que no espera. Hay que estar disponible para ilusionarse a tumba abierta, con ese incierto mañana.

Porque en cada amanecer, cambia el mundo entero.


viernes, 21 de octubre de 2011

en el aire

De un tiempo a esta parte está anclada en tan bellos recuerdos, que le impiden crear nuevos recuerdos.

Siente la tentación de dejarse caer en la añoranza, y cerrar los ojos a la vida.

El presente la llama a voces. Sabe que sin el esfuerzo de batir sus alas, corre el riesgo de perpetuarse en el nido.

Es preciso, imprescindible, que desnude su alma. Impedir que las nostalgias se le hagan tan cómodas, que no se resista a descansar en ellas.

Ha de salir entera o a pedazos de este naufragio, de esta deriva, y alcanzar un trozo de tierra firme, donde enterrar el aturdimiento, la incredulidad, el alarido y el dolor.

Aprender a curar y construir, adentrarse en ese campo de batalla que es la vida, Arrojarse al abismo del sentir. Volver a estremecerse de amor.

Hoy le palpita el convencimiento.

Ya veremos mañana.


domingo, 16 de octubre de 2011

parole parole parole

Llegó en el momento oportuno, y abrió las ventanas de tu ilusión.

El tiene el don de la palabra fácil (facilona), dulce, (empalagosa), diplomática (falsa). Carece de la calidad que otorgan los hechos bien hechos. No conoce la elegancia de la contundencia que abriga. Una figura cubierta de plumas, sin peso y sin valor. Mórbido y mediocre, como una almohada de paja.

Amiga, hoy lloras porque no ves que será sencillo olvidar el humo, cuando la noche se ilumina con hogueras crepitantes, que secaran tus lagrimas con el calor de sus llamas.

Ahora sabes, porque lo has vivido, que un torrente de palabras, puede tener menos valor que un oportuno silencio, ese silencio que enamora, y nos implica en el milagro de beberse los días.

Tu no regalas tu tiempo a un vulgar payaso, que vestido de gallo, cacarea, y solo obtiene respuesta de gallinas, que conviven en su corroído palo, con un suelo lleno de estiércol. Ese es su paisaje.

Lo tuyo fue solo un sueño. De esos sueños está hecha la vida, la tuya, la mía, la de todos los demás.


viernes, 7 de octubre de 2011

al mal tiempo

Cuando el mundo se nos apaga y nos deja a tientas con sus infiernos. Cuando el amor se nos escapa con la urgencia de un río. Cuando las dificultades se acumulan, como posos de vinagre. Cuando nuestro ojos aterrados contemplan como se van despeñando las ilusiones. Cuando los sueños se evaporan y solo quedan mustios despertares, entra por la puerta grande, con un solfeo de rencores, la amargura.

Esa dama siniestra y violenta, que cambia los colores de nuestro cristal, empaña sentimientos , nos vuelve intolerantes, y nos convierte en jueces subjetivos de cuantos nos rodean, exigiendo virtudes que colmen nuestras necesidades, olvidando que la imperfección es el eje, donde gira el universo entero.

Todo es poco o demasiado. La felicidad es sinónimo de falsedad. Los triunfos están comprados. Las alegrías ajenas, nos escuecen. Vamos encerrándonos en esa cárcel seca y fría de la envidia.

Póngale música: “error de mis errores, vida mía que me hiciste..”

Porque es una gran verdad que el resentimiento ahuyenta los buenos sentimientos, que los celos atraen al resquemor, y que los ácidos corroen hasta el metal.

Planta una sonrisa en el jardín de la dificultad, riega con esfuerzos las flores del problema, abona sin miedos esa tierra que hoy es barro. Verás el renacer de unos brotes, reclamando su presencia. Ya nos lo dijo Neruda, podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera.

Y además no te freirás el hígado.


sábado, 1 de octubre de 2011

quien

En el ansia por topar con el impecable amor. En la persecución constante de la estable permanencia. En ese prenderle fuego fastuoso y fatuo a los días, nos detenemos.

Mientras, por los caminos de vida, transitan las amistades, la risas repentinas, los aires que acarician, las músicas del mundo, las miradas en flor y la alegría.

Quien se hace cargo de este absurdo?.